Ahora tengo profesión: soy costurera
Emebet Tadele vive en Meki, Etiopía, tiene 26 años, dos hijas y un pequeño puesto de costura cerca del centro Kidist Mariam, donde hace arreglos y prendas de vestir.
Emebet es ejemplo e inspiración para las 170 mujeres que forman parte de nuestra campaña de Navidad “Puntadas que llegan muy lejos”, una iniciativa para impulsar su formación. El primer paso para lograr un empleo en el ámbito de la costura y la artesanía textil y ganar en seguridad e independencia económica.
Descubre su historia y anímate a participar aquí para que muchas más mujeres puedan dar la primera puntada
¿Cómo conociste los cursos de costura, Emebet?
Cuando se inauguró el centro de Capacitación de Mujeres Kidist Mariam, hicieron unas obras para convertir un garaje para vehículos en cocina y almacén de cocina. Yo trabajaba en esa construcción transportando cemento, arena, ladrillos, y otros materiales que se necesitaban. Me enteré entonces de que acababan de inaugurar el centro y que ofrecían cursos de capacitación para mujeres como yo. Cuando acabamos la construcción, me registré en el curso de costura. Estudiaba por las mañanas y ayudaba con la limpieza del centro por las tardes para tener un pequeño sueldo. Así empecé. Primero estudié un año, luego otro y ahora participo en la cooperativa de costura del centro haciendo mascarillas de protección para el COVID-19,batas para el personal sanitario de los centros sanitarios y uniformes escolares.
¿Qué es lo que más te motivó de esta formación?
Mis dos hijas dicen que soy la mejor costurera de Meki…. ¡Y eso es una gran satisfacción para mí! Desde que aprendí a coser, ya no he tenido que trabajar más en la construcción, ahora tengo mi propia profesión: soy costurera. Hace menos de un mes, todas las estudiantes de costura del Kidist Mariam hicimos un examen oficial del gobierno, y lo aprobamos todas. Ahora tenemos la titulación oficial de CoC (Certificate of competency), que nos permite trabajar oficialmente y recibir el sueldo adecuado. Desde que acabé los cursos de costura en el Kidist Mariam, no me han faltado oportunidades de trabajo.
¿Qué hiciste tras la formación en costura?
El día que nos graduamos todas las estudiantes de mi curso del centro Kidist Mariam, entre todos los asistentes organizaron una colecta especial para que yo pudiera comprarme una máquina de coser. Compré la máquina y he montado mi propio puesto cerca del centro. Ahora arreglo y hago prendas de vestir a las personas que me lo piden, y también participo en la cooperativa de costura del centro. Las profesoras, las estudiantes y las que ya nos graduamos hacemos un buen equipo de trabajo. Yo disfruto trabajando, y sé que muchos niños y niñas de familias pobres ahora tienen uniformes para ir a la escuela gracias a nuestro trabajo. Me gusta que parte de mi trabajo pueda ayudar a estos niños y niñas, y recibir por ello todo lo que necesito para cuidar y ocuparme de mis dos hijas.
¿Qué les dirías a las personas que llevan tus prendas?
Yo les digo que cada prenda es única, para el que la hace y para el que se la pone. Para mí lo es, por el largo camino que he tenido que recorrer hasta poder tener mi propia “tiendecita”.
Al igual que Emebet, muchas otras mujeres han elegido la artesanía textil como una vía para su desarrollo personal y económico. Solo necesitan apoyo para empezara formarse y conseguir los materiales y máquinas necesarias para que su objetivo se haga realidad. ¡Ayúdanos a hacerlo posible!
Puedes participar:
- Por transferencia bancaria a ES94 2100 0079 8402 0141 3162.
- A través de Bizum con el código 00296.
- Con tarjeta bancaria, utilizando el formulario que encontrarás aquí.
Con tu apoyo lograremos que muchas más mujeres puedan decir “Ahora tengo profesión: soy costurera”.
Este proyecto también ha contado con la colaboración del Gobierno de Navarra.